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Acabo de llegar de una "clínica" de masaje. Obvio, masaje para hombres. Y pensé que si pagaba, pues tenía derecho a pedir lo que fuera ¿no? Error. Nunca me animé.
La chica del masaje no era muy iluminada. Malhablada, vulgar. Empecé a pensar que era mala idea. Pero decidí que no iba a pagar por tener una relación sexual, sólo quería el masaje y ver qué tanto se podía pedir.
Primero el estúpido sauna. No me gustó, no era bonito. Luego bañarse. Entonces oprimí el timbre. Ella llegó con chancletas de piso, la escuché quitarse sus sandalias tipo "prosti". Esperé entablar una conversación en la que pudiera prestarse a que me hiciera cosas con los pies o yo tocárselos, pero ante su mutismo, su estupidez natural y sus pies no muy bien cuidados, desistí de todo intento.
Al fin acabó la sesión en 10 minutos. Su sobrepeso (no lo mencioné, verdad?) la hizo sudar mientras le preguntaba cómo era la relación completa pagada y me dio pocos detalles. La vi ponerse las chancletas (se las había quitado para subirse sobre mí y apachurrarme) y desaparecer tan rápido como llegó.
Un poco frustrado, la crema se me pegaba en todo el cuerpo y decidí que no había sido un dinero muy bien gastado. A la próxima, iré a algún lugar donde las chicas sean más dispuestas!
PLUS: CAda vez hay más sandalias por el calor! Las invito a todas a hacer lo mismo, y quitárselas cada que se puedan sentar!
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